4 de maig 2011

Rihanna






La historia es vieja como el mundo: joven guapa y con talento encuentra su Pigmalión particular y se convierte en estrella. Esta vez el proceso fue un poco más complicado dado que hubo que romper un eslabón intermedio: Rihanna de dieciséis años, y su madre tuvieron que cambiar de vida, trasladarse a los Estados Unidos y poner en juego todo su futuro con un único boleto de lotería en sus manos: el talento y el encanto de la niña.

Robyn Rihanna Fenty, nativa del paraíso tropical de Barbados (sol, playas blancas, palmeras y piña colada al atardecer…) canta desde pequeña. Tiene la cara redonda, los ojos rasgados y la silueta de una avispa estilizada. Su descubridor, Evan Rogers, se quedó deslumbrado cuando, acompañada de su trío vocal estudiantil se presentó, pizpireta e ilusionada, en el hotel tropical donde el poderoso productor pasaba sus vacaciones caribeñas.

Rihanna es una cantante que no se parece a nadie. Nunca antes el paladar musical anglosajón había podido catar su combinado tan explosivo de sensualidad caribeña y agresividad racial. Pero, como ella misma se apresura a explicar cada vez que tiene ocasión, Mariah Carey, Beyoncé, Alicia Keys, Celine Dion, Brandy, Janet Jackson, Whitney… El mismo Michael Jackson, el indiscutible Bob Marley y la incombustible Madonna han dejado sus huellas en ese conglomerado exótico y sicalíptico, picante y dulce a la vez, que se llama Rihanna.

Bajo la protección de Rogers, Rihanna fue contratada por el sello Def Jam y catapultada a la fama con tres álbumes titulados “Music of the Sun”, “A Girl Like Me” y “Good Girl Gone Bad”. Sus cambios de peinado, su vestuario cada vez más heterodoxo y provocador, su erotismo, a veces latente y a veces explícito, sus videos y su paraguas le granjearon la fama, la fortuna y el amor. Su romance con Chris Brown y el triste y violento final del mismo han sido cacareados en todos los medios amarillentos.

La serena belleza de su rostro en las elegantes y misteriosas fotos promocionales de su nuevo álbum nos dan a entender que una mujer más templada y dueña de sí misma ha surgido de la tragicomedia de fama, inconsciencia y drama que ha sido su vida. Dentro de muy poco podremos disfrutar de los hipnóticos y contagiosos sonidos y colores de sus nuevas canciones. Y seguramente vamos a disfrutar, bailar, cotillear y divertirnos de nuevo con la sal, la pimienta y la melaza acaramelada y aromática que aliñan y vigorizan la música de Rihanna.

“Rated R” de Rihanna se edita el próximo mes.