13 de nov. 2013

Proyecto "Grandes éxitos" para Cara B/Lengua de Trapo ¡Por fin!


Oscuridad. Sudor. Humo. Estruendo ratonero y machacón. Cuerpos hacinados. Hombros, brazos, empujones. Jóvenes harapientos con el pelo erizado deambulan de un lado a otro con expresión vacua y alelada…
¿El infierno? 

¿Treblinka? 
¿El Love Parade?
¡No, qué va! Es solo el Rock-Ola.


Después de muchos meses de trabajo y muchos malos ratos, el libro sobre "Grandes éxitos", único LP de Alaska y los Pegamoides ha entrado por fin a imprenta.

Las cinco líneas de arriba son el principio del libro. El final es está frase de mi apreciado Javier Furia:

Me acuerdo de ella y de Carlos leyendo las revistas del corazón en casa de las Costus y sabía que, al final, ella sería la protagonista de las revistas del corazón. Apostar por Olvido era apostar por caballo ganador. 

Entre una y otra 130 y pico páginas y más de un año de trabajo. En realidad, una vez recopilado el material, hubiera podido liquidar la redacción,o en dos o tres meses, pero, este paseo por una etapa de mi pasado que odio me ha resultado mucho más desagradable de lo que pensaba.

¿Desagradable por qué?

En principio, he trabajado sobre una enorme selección de recortes de prensa generalista.¿Qué hay de malo?


Muy bien. Tengo carnet de la BN y me traje un pinchito USB lleno de pdfs en los que se hablaba de  Aslaska, de Alaska y los Pegamoides y de Carlos Berlanga. Más de 100 pdfs.

El primer problema resultó ser que los pdfs de la BN viene cerrados y no permiten el corta-y-pega, de modo que me tuve que teclear todos las selecciones. ¡A ver que más les dará pasártelos abiertos! Pues, bien, te los dan cerrados y ahí me tienes: tecleando...

Eso debía ser alrededor de 12-12/1-13. Está muy bien teclear porque prestas más atención a la selección, a lo que dice y cómo lo dice para luego sacar más jugo en el análisis.... Eso estaría bien, si los extos fueran normales, pero los textos llegaban a decir cursiladas de alto calibre:

«Y esa elección, ese tomar partido apasionadamente es, como de costumbre, algo más que un devaneo estético. La estética, ya lo decía el pobre Gide, que se dejó la piel en el empeño, no es más que un modo de plasmar los fantasmas de la ética. (...) Olvido Alaska se nos vistió de negro y hueso. La frivolidad de la carne abrazada a la severa dignidad del esqueleto. El coqueteo con la realidad ampliado al nivel de lo trascendente y serio»

O, mejor aún:

«Alaska nace a la noche como una gran cacatúa. Es la cría rebelde de una mofeta aprisionada aún en su gasa de crisálida. […] Un sueño ignorado de Edgar Allan Poe, la huida de Dorian Gray de su retrato. […] Toda la literatura, la excreción de generaciones convertidas en una nota monocorde, aguda, en el grito de unos jóvenes que están tan viejos como sus padres y desfilan por la noche sin saberlo […]»[2].

Como soy muy sensible, leerme y teclearme 111 páginas dedicadas a la necedad me empezó a amargar. En aquella época, 1981, 82, 82, se estaba perpretrando la sociedad injusta y demencial que disfrutamos ahora, embadurnada convenientemente con la melaza viscosa de la modernez para que no nos diéramos cuenta de lo que pasaba: España atravesaba una de sus crisis económicas, el paro ascendía a velocidades supersónicas y, por primera vez en la historia, los jóvenes no podían integrarse en el mercado de trabajo. Los recién licenciados ya iban de cabeza al paro: los desempleados dentro de la población entre 16 y 24 años suponen el 50,33% del total de parados y las mujeres entre 16 y 24 años representan el 64,59%.

Fenómeno. Mientras tanto, nosotros nos divertimos en Rock-Ola... Bien, yo no sé si alguien se divertía en Rock-Ola, pero en mi bando no había más que protestas: los grupos eran horrorosos y normalmente no aguantábamos ni media canción... Estaba permitido fumar, el extractor de humos no funcionaba y te pasabas el rato llorando, los atrevidos que probaban el alcohol decían que no podía ser peor... Y todo entre gritos de "¡Viva España!", "¡Viva Madrid!", "¡Viva la modernez!", "¡Somos los mejores!"  y "¡Nos tienen envidia!" en el más puro estilo triunfalista y cuartelero de los colegios mayores y las tunas nacionalcatolicofalangefranquistas...Estaba claro que se empezaba a crear la gigantesca bola de nieve que es hoy día La Movida: un movimiento con su nombre, sus protagonistas,  su leyenda y sus  víctimas, pero sin obras, sin resultados, sin nada...

En fin... He pegado aquí abajo unos recortes de periódico, para quien quiera meterse en el tunel del tiempo y viajar a 1982 de la mano de las rotativas de ABC, La Vanguardia, Diar16 y el Debate... Todos empeñados en convencer al mundo de que lo en Madrid se cocía algo que iba a ser sonado: una juerga juvenil de tres al cuarto con borracheras, vomitonas y alguna hepatitis.

Volviendo al libro, he tenido que contar todo eso y de poco me da un ataque...  Bueno, ¡ya está hecho!... Mi punto de vista no es el oficial y espero que levante ampollas, porque yo estuve allí, aunque para entrar en Rock-Ola tenía que pedir permiso al relaciones públicas a pesar de que estaba en un programa con Carlos Tena y Juan de Pablos en Radio 3. No me gustaba nada de lo que veía.


Ahora bien, el libro no es sobre la Movida, el libro es sobre un disco que podemos decir fue el pistoletazo de salida para la el ataque de necedad colectiva llamdo la Movida. Por lo menos, puedo recomponer latrayectoria y las actuaciones del grupo entre todas las zarandajas posmodernetas... cualqueir cosa que Alsaka y Carlos Berlanga hacían o decían era recogida y amplificada por la prensa. Todos los consiertos y apariciones públicas.

Después de leerme todo aquello, tengo la cabeza llena de paja, pero muy pocas noticias sobre "Grandes éxitos" y  resulta que todas son espurias y colaterales. Poco más que cotilleos sin ton ni son. Hay que buscar a los testigos directos. A los que estuvieron en primera fila y todavía no han hablado.

Me cito con Ángel Altolaguirre, técnico de sonido, guitarrista suplente, líder de Ángel y las Guays y productor de "Canciones profanas". Intentamos atar cabos y reconstruir la histroia. Ángel es sobre todo una mina de anécdotas. Ahora es maestro de yoga en Malasaña: http://www.latortugafeliz.es.

Malés Castaño, de Roll, la agencia de mangement, fue la road mánager de casi todos los grupos y viajó con Alaska y Dinarama durante toda las etapa de éxito del grupo. También estuvo involucrada en el principio del hip hop español a través del sello Trova distribuidores de Tommy Boy y productores de los primeros grupos que se grabaron en Madrid. Malés empezaría a trabajar directamente con los ex-Pegamoides un poco después del final del libro (mayo 83), pero, la verdad, pasé un día delicioso con su encantadors familia y me pasó información valiosísima acerca de las giras y los negocios musicales en aquella la época. Actualmente, ella y su marido se dedican a la orfebrería y joyería: http://malesse.com.

Como resulta que en el disco no hay créditos, contacto con Óscar Ruiz a traves de su Web dedicada a Grateful Dead: http://estacionterrapin.blogspot.com.es/. Óscar trabajaba en Hispavox. Charlo con el por Skype.A parte de tener un montón de información acerca de cómo y por qué Hispavox se interesó por los grupos modernos, Oscar recorrió media España con Alaska y Ana Curra presentando el disco en emisoras y eventos.

(Continuará)
  
 

Para más info:
http://lenguadetrapo.com/blog/category/cara-b/